La legionella es una bacteria peligrosa que prolifera especialmente en entornos húmedos con agua estancada y temperatura moderada, condiciones comunes en spas, jacuzzis, saunas y circuitos de agua.
En Insec tenemos como objetivo su prevención y control, imprescindible para proteger la salud de clientes y trabajadores. Por ello, vamos a abordamos cómo detectar la legionella y las principales medidas para mantener tu centro de bienestar seguro.
¿Cómo detectar Legionella en agua?
La detección temprana de legionella es fundamental para evitar riesgos en los spas y centros de bienestar.
Para identificar su presencia es necesario realizar análisis microbiológicos periódicos que vienen determinados en el PPCL. La recogida de muestras de agua debe realizarse en diferentes puntos críticos, como jacuzzis, saunas y circuitos de agua.
Los análisis deben llevarse a cabo en laboratorios acreditados, siguiendo protocolos específicos que garanticen resultados fiables. Ante cualquier indicio de contaminación, como un aumento inexplicable de casos de afecciones respiratorias o tras largos periodos de inactividad, debe intensificarse el registro del agua.
Medidas de control y prevención de legionella: jacuzzis, saunas, circuitos de agua
Control regular de la temperatura del agua
La legionella prolifera fácilmente en temperaturas entre 20 °C y 45 °C. Para prevenir su crecimiento, es imprescindible mantener la temperatura del agua por debajo de 20 °C en los circuitos fríos y por encima de 50 °C en los circuitos de agua caliente y 60ºC en los termocalentadores y acumuladores.
Con el nuevo RD 487/22 es obligatorio realizar controles diarios y registrar estas temperaturas para asegurar que los circuitos de Agua caliente sanitaria (ACS) y de Agua fría de consumo humano (AFCH) funcionan correctamente y detectar posibles fallos de manera inmediata.
Limpieza y desinfección
La limpieza y desinfección es esencial para evitar que la legionella se multiplique. Los jacuzzis, saunas y circuitos de agua deben desinfectarse siguiendo un calendario riguroso, especialmente en superficies propensas a la acumulación de biofilm, como tuberías, filtros y depósitos.
Para realizar estas limpiezas, se emplea biocidas autorizados específicamente para legionella, aplicados siempre por personal formado y siguiendo estrictamente las instrucciones del fabricante.
Prevención del estancamiento del agua
La legionella se desarrolla con mayor facilidad en agua estancada.
Por ello, es imprescindible evitar que el agua permanezca inmóvil en jacuzzis, saunas y circuitos de agua durante largos períodos.
Una forma real de evitar el estancamiento es realizar purgas periódicas en los sistemas y mantener una circulación constante del agua. Durante períodos de cierre temporal del establecimiento, se recomienda vaciar y desinfectar completamente todos los sistemas antes de volver a ponerlos en funcionamiento.
Inspección técnica periódica de instalaciones
Es importante que técnicos especializados revisen periódicamente las instalaciones, comprobando tuberías, depósitos, filtros y sistemas de bombeo para identificar puntos críticos donde la legionella pueda proliferar.
Las inspecciones permiten detectar a tiempo cualquier deterioro o anomalía en las instalaciones y aplicar soluciones inmediatas antes de que surjan problemas más graves.
Formación del personal
El personal del centro debe estar debidamente capacitado para reconocer situaciones de riesgo y actuar correctamente frente a ellas. La formación específica sobre prevención y control de legionella permite adoptar buenas prácticas en la manipulación del agua y equipos relacionados.
Esta capacitación debe renovarse regularmente para mantener actualizado al equipo sobre nuevas normativas, métodos preventivos y protocolos de actuación frente a posibles contaminaciones.
Control del biofilm en circuitos de agua
El biofilm es una capa bacteriana adherida a las superficies húmedas que protege a la legionella de tratamientos convencionales. Su control es esencial mediante métodos mecánicos y químicos, como el uso periódico de productos específicos y procedimientos físicos, por ejemplo, cepillado o técnicas de alta presión.
Mantén a raya el biofilm, es decisivo para prevenir la multiplicación de la legionella en las instalaciones, garantizando así la seguridad microbiológica del agua utilizada en los spas.
¿Qué hacer ante un caso detectado de legionella?
Si se detecta un caso confirmado de legionella, es crucial tomar medidas inmediatas.
En primer lugar, debe comunicarse a las autoridades sanitarias correspondientes y seguir estrictamente sus recomendaciones.
Además, se procederá a la desinfección completa y exhaustiva de todas las instalaciones implicadas, intensificando la vigilancia microbiológica hasta que se confirme la eliminación total de la bacteria.
En estos casos, lo más sensato y por otra parte obligatorio, es contar con especialistas en el sector que cuenten con una larga trayectoria y que apliquen su método en base a la regulación, como hacemos en Insec.
Así que ya sabes, si necesitas asesoramiento o una revisión completa y profesional de tus instalaciones, contacta con los expertos en prevención y control de legionella de Insec.
Nuestro equipo especializado puede ayudarte a implementar todas las medidas necesarias para mantener tu spa o centro de bienestar seguro.
Para más información, puedes contactar con nosotros directamente aquí.
